Dejaremos las tumbas atrás.
Te lo advierto, nunca podrás volver a traer flores. Pero recuerda, tienes que dejar de poner a los sepulcros máscaras que escondan tu tristeza.
Ya… ¡hay que olvidarlo!; despídete de ellos hoy… con tantas lágrimas como lo necesites y deja sólo una flor más, la última de todas.
Echaremos los pensamientos hacia el frente, muy lejos de las tumbas frías en donde dejarás tus muertos.
Hay muchas cosas que mirar más allá de estos sepulcros. Miraremos las nubes a nuestros pies, el agua sobre nuestras cabezas y recorreremos ese sendero que evitaste por tanto tiempo. Ahora sabes que lo que te contaron de él, fue mentira… sólo historias atemorizantes para evitar que lo recorras. Porque todos, los que te aman y los que no, temen que descubras los lugares prohibidos. Tú sabes por qué.
Nunca hubo muertos en ese sendero que te impidieron andar y tú lo sabes, es la puerta que te llevará a nuevos mundos… Los muertos los dejaremos atrás, y te lo aseguro… tú seguirás viva hasta que mueras…
Lo sé, duele dejar atrás lo que ya no se necesita. Pero verás… Todo pasa.
Sigamos.
Martha Vargas Caballero y/o Paloma Domitsu
Paloma Domitsú, poesía 