Esperé este medio siglo
para rezarle a un extraño
Este poema que escribo
Para que él sín intención,
ignore lo que le digo
y todo lo que aquí soy…
Sin embargo fue el azar
Que me puso cual testigo
A un extraño en un vagón
Neutral y efìmero amigo
De mi banal existir
Aleatoria es la existencia
No deja a quien queremos
sino quién debe de estar
Para aprender del momento
Pues contarle a este extraño
como he vivido estos años
intrascendentes para él
me hace ver que he sido fiel
a mis promesas de antaño
Agradezco mi palabra
contundente y abundante
sabia elocuencia brillante
pasión sincera y delirante
que a nada tiene temor
¡Esperé este medio siglo!
Para encontrarme en su amor
Aleatoría e inconsciente,
Siempre deseando su olor
Esperé todo este tiempo
para saber que no importa
si me entiendes o me escuchas
solo quiero que me ames,
Y a pesar de lo que creas
No me importa si me admiras
solo quiero que me mires
Y en tus ojos que no mienten
Me reveles tus pesares
Para aceptarme aleatoria,
imperfecta, sin manual
para que nada me importe
Trascender el bien y el mal
para viajar a París y convertirme en ritual
He esperado tantos años
Para olvidar viejos miedos
y crearme algunos nuevos,
en los que pueda crecer
Medio siglo me ha tomado
admirar mi fortaleza
Pues cultivando mis miedos
He cosechado mis fuerzas
Perdonarme mis rarezas,
entender que mi entereza
Anormal, amenazante
no es la brisa matutina,
que se encuentra en cualquier hoja
A todos causa sorpresa.
Medio siglo en liberar
a la mujer que en mi peca
y otorgarle este lugar
que su sexo y libertad,
Le otorgaron desde siempre
bella y eterna en sus placeres
Buscando la soledad
Medio siglo descartando
lo que me han dicho los jueces
porque eso y mis palabras
siempre me ha hecho más fuerte
Mi rareza y mil caretas
que me ha traído hasta el mar
despues de 5 años ya
encontrar en este rio
camino a la inmesidad
como lo encuentran los peces
impredecible momento
De entregarte a la corriente
sin saber si moriras
Perdonar aquella bruja
que robara mi violín
Y rompiera mi guitarra
para entregarme a este piano
sin culpa de saberme fuego,
oportuna libertad
Melodia que no se oculta
Y que hasta a las aves arrulla
Medio siglo me ha costado
llegar a la conclusión
que no venderé lo que escribo
¡Negociaré mi intelecto!
Siendo Calma temporal
Confianza a flor de piel
Guerrera, líder y atea
Que no le teme a la batalla
pero a La Paz siempre reza
Medio siglo he esperado
para escapar de mi misma
y llegar a esta cima
donde nada puedo ver
mas que a mi cuerpo y mi ego
De donde no puedo huir
Pero algo si… aprender
Para entender las palabras
que mi madre me decía
cuando en la niñez pedia
que cuidara a mi familia
hoy distante … tan tan fría
Para aceptar que mi padre
marcharìa en otros rumbos
talvez nunca fue feliz
Siempre buscando otros mundos
Para aceptarme aleatoria… impredecible
celestial y demoniaca
pasión sincera que amanza
a mis demonios con lava
Normal sensible, amante libre
Pasión que la vida entrega
sin morir en el intento
reviviendo en mis recuerdos
esos, tus ausentes besos
Para entender que en la vida
Cuando se unen dos seres
Se resuelve los temores
Te ganas el paraíso
porque dios asì lo quiso
Pues cuando estoy en tus brazos
olvido que soy atea
Transcurrieron cinco décadas
Para ver este arcoiris
que durará eternamente
Mientras lo guarde en mi mente
Augurio de buenos tiempos
Me bautizó en buena suerte
Esperé este medio siglo…
… esperé, pero avancé
Llegué a donde no planeaba
y expectativas solté
Pues todo lo que anhelaba
para empezar a escribir
La otra mitad de mi historia
se me ha revelado hasta ahora
y que mi nueva mitad
nazca aleatoria y gloriosa
Cinco días después estoy aquí,
¿Acaso ahora me ves?
Creo ya no me importa
pues yo si me logro ver…
y te puedo ver también
Reflejando mi interior,
la vida que quiero ser
PALOMA DOMITSÚ / MARTHA VARGAS / 7 DE MARZO 2024