CUENTO MEXICANO

Como recorriendo una lemniscata (el símbolo de infinito), así transcurren algunas historias; al menos eso me parece, en una sarcástica figura donde el principio y el fin, están siempre entrelazados, lemniscatas que se vuelven tan complejas que recrean callejones que pareciera… no tienen salida.
Capítulo 1 – LA PESADILLA
Bí thogi ndunthe ya pa, pe ndunthe ya pa, ar dängu bí be ar de: thä jar jo’mi, pa ndi hñäts’i ma ‘na jar ha: i ho xki thets’i ar dehe. Ho: ntho mar me:ti ya thä. Bí hñeki ar jo’mi pa ndi ‘ñägi ya thä. (El Origen del Maíz, cuento Otomí… Fragmento)
Traducción: Hace mucho tiempo, pero mucho tiempo, la rata robaba el maíz del tapanco para llevarlo a otra tierra, rodeada de agua. La rata era la única dueña del maíz. Agujereaba el tapanco para robar las mazorcas. (El Origen del Maíz, cuento Otomí… Fragmento) **1
Cecilia Caballero una chamaca bien chula y risueña, dicharachera y con la melena alborotada al viento como los elotes, aún a la fecha algunos la recuerdan en el pueblo.
Si, eso dicen… llegó a Temoaya bien chamaca; era muy buena con los hilados, la coloración de telas y la cocina, también le gustaba cantar.
Le pusieron Cecilia por Santa Cecilia, la patrona de los músicos, los poetas y los ciegos. Santa Cecilia prefirió ser torturada hasta la muerte antes que entregar su virginidad, por eso la madre de Cecilia le puso así, a ver si ella rompía con la maldición que había atormentado a las mujeres de su familia, que tarde que temprano los hombres de razón se las acababan cogiendo y llenando de hijas que tarde que temprano alguien más se acabaría cogiendo también. Esa había sido la historia de sus ancestras, que siempre acababan muriendo jóvenes, pobres y llenas de hijas. Las mujeres Caballero. Las malas lenguas dicen que a alguna de sus antepasadas se la había cogido un español, por eso lo de los pelos de elote y la maldición de la malinche.
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